La Procuraduría General de Justicia del estado de México analiza genéticamente restos humanos que fueron localizados en la zona serrana del municipio de Tlatlaya, al sur del estado, pues se presume que éstos pueden corresponder a los dos notificadores del Servicio de Administración Tributaria (SAT) desaparecidos desde el pasado 16 de junio.
El procurador Alejandro Gómez Sánchez informó que el ministerio público del fuero común cuenta con indicios que señalan que Hugo Arochi Roa, de 50 años de edad y Saúl Ortega Montiel de 26 años, habrían sido levantados miembros de un grupo criminal en la zona sur del estado y posteriomente privados de la vida.
A decir de algunos testimonios que ha recabado la dependencia sobre el paradero de ambos notificadores del SAT, los cuerpos de los dos servidores públicos habrían sido incinerados, muy cerca de dónde fueron ubicados estos restos humanos.
Desde semanas, el área de periciales de la Procuraduría mexiquense labora en realizar exámenes genéticos que permitan confrontarlos con el ADN de los notificadores para conocer si alguno de estos restos corresponden a alguno de ellos.
Hasta el momento, la PGJEM no ha logrado ubicar a los dos servidores públicos, pese a que durante varias semanas hubo un operativo desplegado en toda la zona sur del estado colindante con Guerrero, con apoyo de la Marina y el Ejercito para dar con ellos.